picado fino
Inauguramos una nueva columna de Aldo Mazzucchelli: Picado Fino. La Banda Oriental y lo que a tumbos le siguió es, como todos los países, una ficción; siendo tal, tiene tanto derecho a existir como cualquier novela. Este texto es una acumulación o enumeración no casual. La superimposición de apariencias de orden al caos es la característica fundamental del hábito de sonar y ver al que llamamos lenguaje. Si alguien tomase un vidrio, lo enmarcase, y lo aplicase alternativamente sobre zonas de la arena de una duna, de modo que cada vez reconociese, en las marcas que quedan bajo el acorralado vidrio, un orden significativo, obtendría un arte enigmático. Si lograse, junto a al menos un amigo más, memorizar algunas de estas formas que se aparecen, de modo de poder ambos reconocerlas de nuevo en otras posturas del marco, ya estaría escribiendo, y la duna se habría transformado en un mar de posible significado. No creo que la letra sea muy distinto a eso, ni mucho más que eso. Salvo que hoy tenemos un mundo donde hay ya seguramente más letras impresas, o bits de información, que granos de arena en todos los desiertos emplanetados.